domingo, 4 de noviembre de 2007

VALLE DE LA MUERTE Y VALLE DE LA LUNA

Como San Pedro de Atacama es tan tan tan chiquitito (prácticamente sólo tiene 4 calles), lo único a lo que puedes dedicar el tiempo aquí es a comprar, a comer o a hacer excursiones. Nosotros hemos decidido aprovechar los días que nos quedan en Chile para conocer todos y cada uno de los paisajes de los alrededores de la zona. La primera toma de contacto nos ha dejado sin palabras.

Para ir aclimatándonos a la altura (estamos a 2440 metros de altura y la falta de oxígeno se nota), decidimos hacer la excursión más corta el primer día: el Valle de la Luna y el Valle de la Muerte. Nos quedamos con la boca abierta.

Caminando por el Valle

Nosotros en el desierto

Hace millones de años este desierto estaba lleno de agua. A consecuencia del movimiento de las placas tectónicas se formaron varias cordilleras que impidieron que a partir de entonces, llegaran las nubes y las precipitaciones aquí. El agua se secó y ahora la vista es la de una enorme extensión de desierto de sal. Hay 330 días al año que no llueve, imaginaos.

cordillera de Sal

A pesar del nombre, el Valle de la Muerte no se tragó a ningún explorador, ni todavía a nigún turista... Consiste en formaciones montañosas de sal y dunas inmensas desde las que te puedes tirar rodando. Divertidísimo. Eso sí, te llevas el recuerdo de haber tragado arena del desierto más árido del mundo.

Jugando en las dunas

Rodando

Después de caminar por cañones formados por rocas de sal, llegamos al Valle de la Luna, uno de los espectáculos más maravillosos de los que se puede disfrutar aquí. Tras subir una duna, la gente se agolpa para ver un atardecer de película. Imposible describirlo, así que aquí os dejamos unas fotos, para compartirlo con vosotros.

Atardecer espectacular

Atardecer en el volcán Licancabur

3 comentarios:

Enriqueta dijo...

Hola chicos:

He visto vuestras fotos y me elegra veros tan contentos.

Si necesitais ayuda con las maletas tengo unos dias libres.

Un besito, Enriqueta (Keta)

Peter Parker dijo...

Cada día me dáis más envidia, esto no puede ser. Y mientras, mis perspectivas de viaje son tan exiguas...

Anónimo dijo...

Vaya sitio!. no me dais envidia esta vez (bueno,un poco), yo vi amanecer en el desierto. Mas besitos